Tratamientos inutiles

Hola a todos, el titulo parece hasta algo que no nos extrañe o llame la atención, pero voy a ir por pasos y espero que al final aprendamos un poco más, sabéis que es mi principal objetivo.

Primero, cuando nos encontramos mal, esperamos unos días, luego pedimos cita a nuestro doctor de familia, nos dan para varios días después, hay un porcentaje de personas que mejoran un poco sus dolencias y no llegan ni a ir, otro porcentaje empeoran antes y van al servicio de urgencias, el resto van a la cita.

Cuando estamos frente del Doctor y contamos nuestras dolencias, lo primero que buscamos es el alivio del dolor. Calmantes, analgésicos, relajantes musculares, etc… los laboratorios disponen de un gran arsenal contra el dolor.

Antes de continuar, quiero dejar claro que soy un fan incondicional de los doctores, ATS, enfermeras y profesional sanitario, pero entiendo que sus recursos a causa del numero de personas, tiempo y posibilidades económicas, les hacen ser victimas también de los poderes políticos o limitaciones presupuestarias en sanidad.

Después de esta aclaración, quiero seguir comentando, que un 80% de los medicamentos que se recetan son calmantes o que buscan reducir o eliminar la sintomatología de un problema, esperando que el cuerpo se auto defienda de la causa, sea bacteriana o vírica. En otros casos se recetan antibióticos o antihistamínicos para síntomas de alergias.

Ahora me toca explicar, hay estudios recientes que hablan de demostrar científicamente, la relación física- emocional o al contrario.

En un experimento realizado recientemente para identificar las emociones, los investigadores le pidieron a los voluntarios que pensaran sobre una de las 14 emociones predeterminadas y que señalaran el área de una silueta en blanco en donde sentían un estímulo por una emoción en particular

El experimento muestra que las emociones tienden a sentirse en su cuerpo de formas que por lo general son consistentes de una persona a otra, independientemente de su edad, género o nacionalidad.

Estudios previos han relacionado el estrés con la disminución en el funcionamiento del sistema inmunológico, el aumento de la presión arterial y niveles de colesterol, así como con la alteración de la química cerebral, los niveles de azúcar en la sangre y el equilibrio hormonal.

La imagen de abajo es el primer paso para lograr visualizar cómo se manifiestan las emociones dentro de su cuerpo. Investigadores en Finlandia pidieron a 700 voluntarios de Finlandia, Suecia y Taiwán que pensaran en una de las 14 emociones predeterminadas y que después señalaran el área de una silueta en blanco en donde sentían un estímulo por una emoción en particular.

Por medio del uso de una segunda silueta en blanco, se les pidió que señalaran las áreas que sentían «desactivadas» durante esa emoción. 

Los resultados probablemente revelan percepciones subjetivas sobre el impacto que tiene nuestro estado mental en el cuerpo, una combinación de reacciones musculares y viscerales, así como respuestas del sistema nervioso que no podemos diferenciar fácilmente.»

Conexión entre la mente y el cuerpo

Es interesante observar que ciertas emociones son conocidas por estar relacionadas con el dolor en ciertas regiones del cuerpo, a pesar de que la ciencia no puede dar una explicación de esto. Por ejemplo, las personas que sufren de depresión por lo general experimentan dolor de pecho, incluso cuando no hay ningún problema físicamente en su corazón.

El dolor extremo (o un evento extremadamente estresante) también puede tener un impacto devastador- no por nada existe el dicho que dice «murió porque le rompieron el corazón». En los días posteriores a la pérdida de un ser querido, su riesgo de sufrir un ataque cardíaco aumenta 21 veces.

Aunque aún no se ha revelado la mecánica de esta conexión entre la mente y el cuerpo, se sabe que es su cerebro, y en consecuencia, sus pensamientos y emociones, el que desempeña un papel importante en su experiencia del dolor físico y puede desempeñar un papel significativo en el desarrollo de enfermedades crónicas.

Por ejemplo, estudios previos han relacionado al estrés con un sistema inmunológico débil, presión arterial y aniveles de colesterol altos, así como la química cerebral alterada, niveles altos de azúcar en la sangre y un desequilibrio hormonal.

También se sabe que aumenta la tasa de crecimiento tumoral. Una de las razones de esto tiene que ver con que la respuesta al estrés promueve la inflamación en el cuerpo.

El problema reside que en nuestra medicina, los doctores no disponen de tiempo para buscar causas emocionales o psicológicas de tu paciente.

¿Alguien me puede discutir? Que cuando a una persona le dan un susto, aumenta su ritmo cardiaco y durante algunos minutos su tensión arterial. O cuando discutimos, enrojecemos nuestra cara, aumentamos el ritmo cardiaco y respiración, ante un estado de nervios, nuestras piernas tiemblan, dolor de cabeza y falta de concentración.

Entonces, existen relaciones y muy directas, por lo cual momentos difíciles a nivel emocional llevan implícitos problemas físicos, cuando la inflamación causada, el aumento de cortisol y la bajada del sistema inmune ocurre, las puertas a la enfermedad se abre de par en par.

Así que nos toca ser nuestros mejores doctores en la medicina emocional, buscar todos los caminos de control, saber ser equilibrados ante los problemas, buscar puertas abiertas ante una ventana cerrada, nos evitara tomar calmantes y por supuesto los efectos secundarios que químicamente se producen en el interior celular, nuestras células, sufren nuestro desanimo, nuestros problemas se reflejan en nuestro organismo, en el átomo más pequeño de nuestro bio control biomolecular.

Pasamos a la acción, trabajemos nuestro estrés, pesimismo, negatividad, discusiones, nervios, porque nuestro cuerpo paga con enfermedades todo nuestro descontrol emocional.

Para más información o ayuda y asesoramiento, aquí te dejo mi contacto o comentame…

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