Quiero hablaros hoy a todos de este gran tubérculo.
La prueba más antigua que se conoce del uso de zanahorias por parte de humanos, en Afganistán, data del año 3.000 a. C. Aquellas zanahorias eran de color púrpura por fuera y amarillas por dentro.
Más tarde, cuando los comerciantes árabes extendieron la semilla de zanahoria por Asia, África y Arabia, surgieron variedades con diferentes tonos de púrpura, blanco, amarillo, verdes e incluso negro. ¿Os imagináis comiendo una zanahoria negra?
La primera zanahoria naranja vino mucho más tarde. Se cultivó en la Holanda del siglo XVI, y fue el resultado de un cruce deliberado para que coincidiese el color del vegetal con el de la casa real holandesa de Orange.
Así que hoy Bugs Bunny come zanahorias naranjas debido al patriotismo exacerbado de Holanda.
En el siglo XVI, los holandeses eran los principales productores europeos de zanahorias, y todas las variedades modernas descienden de sus cuatro tipos de color naranja: la Early Half Long, la Late Half Long, la Scarlet y la Long Orange.
Actualmente se ha puesto de moda volver a cultivar zanahorias de colores. Ya hay tiendas con zanahorias blancas, amarillas, roja oscura y púrpura, para hacer las ensaladas más divertidas. Aunque para añadir diversión, nada como el invento de los islandeses: en 1997 desarrollaron una zanahoria con sabor a chocolate dentro del programa Wacky Veg (Verduras chifladas), dirigido a la población infantil.
Como veis el hombre no puede estar tranquilo, sino degenera lo que toca. Pero como veréis ahora, tiene muchísimas propiedades:
El 87% de la zanahoria está formado por agua.
La zanahoria más larga del mundo midió 5.839 metros (19 pies 1 7/8 pulgadas), mientras que la más pesada se cultivó en 1998 y pesaba 8.61 Kg.
Entre todas las hortalizas, las zanahorias tienen el mayor contenido de vitamina A (betacaroteno). ¡100 gramos de zanahoria aportan el 104% de la dosis diaria recomendada de esta vitamina!
También son una fuente relativamente buena de fibra; una zanahoria de tamaño mediano (61 gramos) aporta 2 gramos de fibra. La pectina es la principal forma de fibra soluble en las zanahorias. Las fibras solubles en la dieta regular pueden reducir los niveles de glucosa en sangre al ralentizar la digestión del azúcar y el almidón; también sirven como alimento para las bacterias amistosas del intestino.
La mayor cantidad de fibra insoluble en la zanahoria está en forma de celulosa, pero también contiene hemicelulosa y lignina. Las fibras insolubles reducen el riesgo de estreñimiento y promueven las defecaciones regulares y saludables
Las raíces tuberosas de zanahoria constituyen una buena fuente de vitaminas y minerales, especialmente vitamina A (betacaroteno), biotina, vitamina K (filoquinona), potasio, hierro y vitamina B6.
- Vitamina A: las zanahorias son ricas en betacaroteno, compuesto que se convierte en vitamina A dentro del cuerpo. Esta vitamina promueve la buena visión y es muy importante para el crecimiento, el desarrollo y la función inmune.
- Biotina: desempeña un papel esencial en el metabolismo de las grasas y las proteínas.
- Vitamina K1: es fundamental para la correcta coagulación de la sangre y promueve la salud ósea.
- Potasio: mineral esencial para el organismo, especialmente para el control de los fluidos y la presión arterial.
- Vitamina B6: es una de las vitaminas involucradas en la conversión de los alimentos en energía.
- Hierro: mineral esencial que interviene en la producción de la hemoglobina (proteína encargada de transportar el oxígeno en la sangre).
Cruda, cocida, al horno, pochada… es para mi la reina de los tubérculos, por esa razón la aconsejo incluso licuada con una manzana ácida, tendrás un delicioso jugo rico en Vitaminas.